Es un procedimiento en el que se reduce el estómago a aproximadamente 25% de su tamaño original, mediante la extirpación quirúrgica de una porción del estómago. Los bordes abiertos se unen con grapas quirúrgicas para formar un manguito (o tubo) con una forma de plátano.
El objetivo es la restricción de la cantidad de alimentos que el paciente pueda ingerir. El procedimiento se lleva a cabo por laparoscopia y no es reversible.